Campamento de verano: Lucía Etxebarría amenaza con irse [VÍDEO]

‘Campamento de verano’ se le está haciendo más complicado de lo que pensaba cuando entró a Lucía Etxebarría, que ha amenazado con irse del programa, o se ha ido, porque aún no conocemos el desenlace. La escritora entró en el reality pensando que iba a ser coser y cantar permanecer en el campamento semanas y semanas mientras llenaba el cerdito de Hacienda. Pero a este paso para lo que va a romper la hucha es para pagar la multa que impone la dirección por abandonar el programa y a ver quién se lo explica después a los señores recaudadores.

El campamento de Lucía Etxebarría, que entró como concursante sorpresa, no está siendo todo lo plácido que, al parecer, se había imaginado antes de entrar. Y es que, por su actitud en el reality, la escritora debía pensar que durante su estancia en el campamento imperarían los juegos, las excursiones por el monte y los debates literarios alrededor de una hoguera por las noches, pero se ha dado de bruces contra un muro de realidad y ahora se quiere marchar. Según dijo antes de comenzar ‘Campamento de verano’, su entrada en el reality tenía que ver con una única razón, saldar sus cuentas pendientes con Hacienda, así lo explicó en su blog, en el que también comentó que esperaba aguantar el mayor número de semanas para recaudar el dinero necesario, pero tres días después ya no puede más y se quiere marchar.
 
La escritora de repente se siente fuera de lugar, aunque para los espectadores cada día es menos extraño verla en un reality, y ha amenazado con marcharse del programa: “Ya he hablado con dirección y les he dicho que me voy mañana. A partir de ahora no hay contrato. No me podéis grabar”, explicó la escritora, que parece entender que si dice que se va no puede ser grabada, por eso insistió al cámara: “Perdona, si ya he hablado con dirección no me puedes grabar”.
 
Lucía Etxebarría estaba saturada de cámaras, pero lo cierto es que con su actitud no estaba sino alimentando el interés de los objetivos y Jeiko intentó hacérselo entender: «Pero Lucy, parece mentira, tía. Cógete el saco y vete para allá y no te van a grabar más. Es que tanto tapar la cámara y tanta gilipollez. Si es que te los estás buscando tú sola».
 
Oda a la humildad
 

 
Pero las entendederas de la escritora no parecen tan ágiles como su pluma y continuó en sus trece: «Hola, por favor, ¿puedes traer mi maleta? Gracias. Estoy anunciando que me voy», y volvía a repetir que no quería cámaras mientras hacía las maletas: «No voy a recoger mis cosas si me están grabando. No. No soy tan idiota para daros hasta el final espectáculo. Me da igual el resto de los compañeros, son ocho. Mi vida, yo querida, vendía 200.000 libros».
 
El problema de Lucía Etxebarría desde el primer día no es la estancia en el campamento, sino sus compañeros, a lo que no soporta: «No sabía que podía ser así y lo siento pero mi vida es otra. Tengo ocho compañeros en contra pero 100.000 fuera que me apoya. Mañana me venderían a su madre si supieran que pueden ganar esto». Durante la gala veremos si la amenaza se cumple o si su deuda pesa más y se queda en el reality.