Alejandro Amenábar irrumpió en la escena cinematográfica por todo lo alto. Estas son dos películas que todos echamos de menos
Alejandro Amenábar dio el salto a la palestra cinematográfica por todo lo alto. El director hispano-chileno no solo revolucionó el cine español, en especial el género thriller, sino que hizo germinar en los espectadores la semilla de que nuestro cine podía llegar a codearse con el que se producía en Hollywood.
No hay duda de que el cineasta hispano-chileno vino para quedarse. Ya lo demostró con Tesis (1996), su magistral obra debut que obtuvo siete nominaciones a los Goya y que, a día de hoy, después de veintisiete años, todavía está considerado uno de los mejores thrillers que ha concebido la industria, así como una de las mejores cintas españolas de todos los tiempos.
La sinopsis oficial reza así: «Ángela, estudiante de Imagen, está preparando una tesis sobre la violencia audiovisual. Como complemento a su trabajo, su director de tesis se compromete a buscar en la videoteca de la facultad material para ella, pero al día siguiente es hallado muerto. Ángela conoce a Chema, un compañero experto en cine gore y pornográfico, y a Bosco, un extraño chico, amigo íntimo de una joven asesinada en una snuff movie».
Tesis es una película de intriga apasionante que, con una premisa tan elemental como unos protagonistas dispuestos a desenmascarar a un asesino, mantiene en vilo al espectador hasta el agonizante último minuto. Además, la cinta es también una crítica ácida a la falta de consideración de los medios internacionales hacia el cine español y de cómo un guion brillante puede llevar a una película de bajo presupuesto a lo más alto de las listas.
Los otros
Si hay otra de las películas de Amenábar que más impactó a los cinéfilos fue Los otros (2001), una adaptación camuflada de la clásica novela corta de terror decimonónico Otra vuelta de tuerca de Henry James. Protagonizada por una excelsa Nicole Kidman, su sinopsis oficial reza así: «La Segunda Guerra Mundial ha terminado, pero el marido de Grace (Nicole Kidman) no vuelve. Sola en un aislado caserón victoriano de la isla de Jersey, educa a sus hijos dentro de rígidas normas religiosas. Los niños sufren una extraña enfermedad: no pueden recibir directamente la luz del día. Los tres nuevos sirvientes que se incorporan a la vida familiar deben aprender una regla vital: la casa estará siempre en penumbra, y nunca se abrirá una puerta si no se ha cerrado la anterior. Pero el estricto orden que Grace ha impuesto se verá desafiado por circunstancias que escapan a su control».
Los otros juega la misma carta que Tesis: la de un misterio que se expande lenta pero inexorablemente por la atmósfera narrativa y que mantiene la expectación hasta su inconmensurable y sorprendente desenlace a la altura de El sexto sentido (1999), de M. Night Shyamalan.
