Las películas slasher siempre han proliferado en el cine de terror, especialmente entre los jóvenes. Te desvelamos cuál ha sido el mejor de estos años
El cine de terror siempre ha encontrado en el slasher gran parte de su audiencia. Este se define como un subgénero dentro del error caracterizado por la cuchillada –slash en inglés-, o, lo que es lo mismo, por los asesinos sedientos de sangre que asesinan brutalmente a jóvenes. Predomina la presencia de litros de sangre derramada y se coquetea con las drogas, el sexo y las fiestas desenfrenadas.
‘Tú eres el siguiente’, estrenada en 2011 bajo la dirección de Adam Wingard, quien ya se prodigó en la industria con la secuela de ‘El proyecto de la bruja de Blair‘ y la adaptación de la popular serie de animación japonesa Death Note, tiene tood lo que un buen slasher recoge en su definición. Su sinopsis oficial reza así: «La familia Davison es atacada por un grupo de asesinos sádicos durante una escapada familiar. Atrincherados en la casa de vacaciones, hacen frente a los asaltantes. Los asesinos enmascarados no contaban con la presencia de Erin, la novia del hijo mayor de los Davison, cuyo misterioso pasado la ha hecho fuerte y muy difícil de matar».
La cinta bebe directamente de otros proyectos como ‘Los extraños’, de Bryan Bertino: una familia de clase alta asaltada sin piedad por un grupo de figuras vestidas de negro y ataviadas con máscaras de animales. Sin embargo, la consabida violencia y brutalidad de la puesta en escena resulta muy efectiva por un guion a la altura de la premisa.
Y es que en Tú eres el siguiente no faltan los sustos, las apariciones inesperadas, los giros de trama y el desarrollo psicológico de unos personajes que, aunque estereotipados en su forma de ser, consiguen despertar en el espectador sentimientos de empatía o rechazo.
La moraleja detrás de la sangre
Contrariamente a lo que suele ocurrir en este tipo de películas, la de Wingard esconde una moraleja detrás de los charcos de sangre y las mutilaciones. Tú eres el siguiente es una buena reflexión sobre el poder y la codicia que acosa a aquellos que anhelan conseguirlo a cualquier precio.
En definitiva, si eres amante del gore, esta es una película hecha para ti. Wingard ha conseguido aquello en lo que muchos otros proyectos del subgénero slasher han fracasado estrepitosamente. Dota a la crueldad y al sadismo que rodean a las escenas un argumento coherente y bien sostenido. Asegura la diversión y, aunque tal vez previsible en algunos puntos, mantiene en vilo al espectador hasta el último minuto.